El bono social, explicado

Qué es el Bono Social? Es una tarifa especial destinada a colectivos vulnerables que implica un descuento en la factura de la electricidad. Se aplica al término de potencia (parte fija) y al consumo (parte variable).

A día de hoy, los beneficiarios del bono social tienen (siempre que cumplan se los requisitos establecidos) un descuento de hasta el 60%. De igual forma, aquellos usuarios considerados colectivos vulnerables severos tienen hasta un 70% de reducción. Además, y gracias a la nueva norma publicada al BOE, el tiempo de tramitación es de 15 a 10 días, y las comercializadoras están obligadas a enviar a todos sus clientes de mercado regulado una carta en la que se detallen todas las condiciones relacionadas con el bono social. Más información

Finalmente recordar que toda la información sobre los criterios de elegibilidad y tramitación está actualizada en https://www.cnmc.es/bono-social

* Información actualizada el mes de enero de 2023.

¿Quién puede acceder al bono social?

En el texto publicado en el BOE el 18 de octubre de 2022 se establece que los usuarios podran solicitarlo si cumplen con los requisitos descritos en los baremos de las siguientes infografías.

NUEVO BONO SOCIAL para hogares con bajos ingresos económicos:

BONO SOCIAL para hogares en situación de vulnerabilidad:

BONO SOCIAL para hogares en situación de vulnerabilidad severa:

¿Quién puede solicitar el Bono Social?

El texto publicado en el BOE en marzo de 2022 establece, en su disposición final vigésima tercera, que los usuarios podrán solicitarlo si cumplen alguno de los requisitos descritos en los baremos de las infografías.

¿Por qué es importante solicitarlo?

Porque es una medida de protección. Y por consiguiente, su aplicación implica una reducción en el importe de las facturas del servicio eléctrico para hogares elegibles.

¿Cómo se gestiona?

La información sobre la bonificación tiene que ser clara, actualizada y tiene que estar disponible no solo en formato digital sino también en papel. Los canales de difusión tienen que ampliarse y reforzarse más allá de la comunicación a través de Internet, porque hay colectivos con dificultades para acceder a dichos canales digitales. Además, las administraciones locales y los puntos de servicio de las compañías comercializadoras de electricidad tienen que facilitar y promover el acceso de los usuarios/as a la bonificación.